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luis no te pases
Hola Pepe,
reconozco que he sido algo transgresor con la moral y las buenas costumbres. Pero el debate no es si se debe o no se debe utilizar dinero público para estos eventos, que en mi fuero interno creo que sí, aunque habría que fijar un límite, que quizá debería apoyarse en la ley de retransmisiones deportivas de interés general. Lo que no sea de interés general no debería ser costeado por las Administraciones públicas.
Decía que el debate lo planteo en la falta de datos de la Administración hacia sus administrados. ¿Cuánto ha costado al Erario público la final de Copa?
A mí me parece que (como casi en todos los órdenes de la vida) el tema es de prioridades. Si el dinero no da para todo y son muchas las necesidades a atender, me parece “económicamente indecente” que se subvencione a los equipos de futbol profesionales (la inmensa mayoría sociedades anónimas) mientras que la educación infantil no es obligatoria todavía, los empastes no los cubre la seguridad social, las pensiones siguen siendo ridículas y otras menundencias que sólo hacen llorar. Sí, de acuerdo que ya hay familias que dedican más dinero al ocio y el cachondeo (incluido ese monstruo de televisor de plasma que vale un guevo) que a la comida (para comer, cualquier cosa….) o a la cultura. Pero soy de los que piensa que primero hay que atender a la salud y a las necesidades primarias antes de tirar los impuestos en subvencionar acontecimientos que perfectamente podrían pasar sin ellos. Y si tenemos el equipo en regional, pues no pasa ná. Que yo sepa, nadie se ha muerto de ello.
Ya sé que esto es pura demagogia, pero también tenemos derecho los currantes a practicarla de vez en cuando. ¿Para el puñetero caso que nos van a hacer!
Pues esa es la línea “bitacoril”, que te gusta a ti decir. Reflejamos aquello que vemos mal, aún a sabiendas de que es imposible (a día del escrito) cambiar ciertas mentalidades, ciertos hábitos, ciertas costumbres.
Prometo investigar qué pasa en otras ligas profesionales. A lo mejor es que la población está más educada de otra forma en materia de espectáculos deportivos.