100.000 millones de euros

«España pide un rescate de hasta 100.000 millones [de euros] para la banca». (En pesetas no me da la cabeza para abarcar tamaña cantidad). Pero no pasa nada…

Con la Roja «somos» campeones del mundo mundial y de la Europa total (más grande la de la UEFA que la de la UE); y «tenemos» a Gasol, a Nadal, a Fernando Alonso, a Contador (pagando todavía el filete…). Y «tenemos» a los moteros Lorenzo, Elías y Marquéz, con Pedrosa, por supuesto. Y a la Mengual, al Craviotto y al Rial, al Samu Sánchez y al Joan Llaneras, a los ÑBA, a los del futbito, y qué sé yo cuántos campeones, subcampeones, y campeones de bronce más.

Los franceses nos tienen envidia y se ríen de nosotros con unos muñequitos. Y más que se han reído cuando los majaderos dirigentes españoles han hecho de ello un asunto de Estado. Y a Nadal le roban un reloj que vale un potosí, más que un magnífico chalé en la costa cantábrica.

De los italianos ni hablar, que se han cargado durante una buena temporada a Valverde sólo porque coincidía su ADN con la sangre de no sé qué bolsas. Envidiosos también de nuestro éxito y nuestro …porte.

El rey mata al hermano, al hermano oso y al hermano elefante. El primero joven y borracho, el último viejo y desdentado. Pero la caza es también deporte. Y el bribón navega viento en popa a toda vela, que eso también es deporte y viste mucho y calza más (con los dividendos que dejan los astilleros de Valencia).

«Estamos» en el G8 del deporte, aunque tal sociedad no exista más que en la mente de un menguado ex presidente. Lástima que estos presi…dentes no acaben siendo presi…diarios por llevar a la bancarrota a un país… Los tres últimos presidentes españoles (padecidos de diciembre de 1982 a diciembre de 2011, ¡29 años!) han salido por la puerta de los perros (y el actual lleva camino de ni alcanzar siquiera el umbral).

Nuestros deportistas son los mejores embajadores de España… Aunque el 90% sean unos redomados zoquetes que no saben hacer la o con un canuto. En los Juegos Olímpicos siempre «ganamos» a priori más medallas de las que refleja el medallero a posteriori. Pero para poner fin a esto se contratan extranjeros que corren, saltan o nadan por España (previamente nacionalizados evitando las listas de espera y robando la posibilidad de competir a un «español viejo»).

En fin, que ahora España es 100.000 millones de euros más rica… o más pobre, porque estas deudas se acaban pagando con sangre. Con la sangre de los trabajadores. Qué vamos a esperar cuando quien debe dar ejemplo a los jueces españoles vive como otro rey viajando a costa del Erario.

Y Mariano Rajoy, con toda su barba, se ha ido a Polonia a presenciar el estreno de la Roja en la Eurocopa, porque según él aquellos otros millonarios necesitaban la presencia del presidente del Gobierno para sentirse apoyados por el resto de españoles. ¿Se habrá ido pagándolo de su bolsillo, o habrá hecho como Carlos Dívar, cargando viaje, cenas y protocolos al castigado Erario español? ¡Vaya!, que ahora «tenemos» 100.000 millones de euros más… Gozábamos del circo, ahora llega el pan.